Adicción a las apuestas: causas, síntomas y consecuencias
La adicción a las apuestas se caracteriza por un impulso incontrolable de apostar sin pensar en las consecuencias. El juego compulsivo puede llegar a poner en riesgo la vida de la persona adicta.
Cuando una persona apuesta, arriesga algo de valor con la esperanza de conseguir algo más valioso. Esto estimula el sistema de recompensa del cerebro de manera similar a como lo hacen las drogas y otras sustancias. De ahí que la adicción a apostar se considere una enfermedad que hay que tratar mediante profesionales.
Causas de la adicción a apostar
No todas las personas que juegan desarrollan una adicción a las apuestas, pero encontramos ciertos factores que pueden asociarse al juego compulsivo:
- Problemas de salud mental. Es posible que la persona adicta a las apuestas tenga trastornos de ánimo como depresión o ansiedad, o trastornos de personalidad.
- Influencia de familiares o amigos. Si la persona se encuentra en un entorno social marcado por la ludopatía, puede que desarrolle un problema de juego patológico.
- Rasgos de personalidad. Las personas con cierto carácter relacionado con la competitividad, la adicción al trabajo, la impulsividad… pueden aumentar el riesgo de desarrollar una adicción a las apuestas.
- Consumo de sustancias. Aquella persona drogodependiente o adicta al alcohol u otras sustancias es posible que fomente su adicción a apostar.
¿Qué síntomas nos alertan de una adicción al casino y juegos de azar?
De manera general, existe una negación por parte de la persona adicta a los juegos de azar. Si sospechas que un familiar o amigo está desarrollando una adicción al juego, lo mejor es preguntarle de forma directa si hay algún problema que quiera contarte y darle espacio para facilitar ese paso.
En el caso de sospechar que juega sin control y que necesita ayuda, observa ciertos comportamientos que pueden alertar de una adicción a las apuestas.
- Perder de manera progresiva sus relaciones sociales.
- Advertir señales de nerviosismo cuando está en una situación en la que no puede satisfacer su necesidad de jugar.
- Apostar como conducta para evadir problemas o aliviar sentimientos como la ansiedad, la culpa o la depresión.
- Mentir a los familiares y amigos para ocultar la gravedad del juego compulsivo.
- Poner en riesgo oportunidades laborales o educativas.
- Contraer deudas por las apuestas y pedir que familiares le saquen de apuros.
Consecuencias de la adicción a las apuestas
La propia vida de la persona adicta al juego, así como su entorno pueden tener consecuencias negativas y duraderas por la adicción a las apuestas de un familiar o amigo.
- Poner en riesgo la vida con intentos de suicidio o pensamientos suicidas.
- Generar problemas en las relaciones familiares y de amistad.
- Adquirir deudas económicas.
- Perder el empleo u oportunidades educativas si se da la ludopatía en jóvenes.
- Contraer problemas legales.
Con el fácil acceso a internet, existen más posibilidades de encontrar adicción al juego online que presencial. De cualquier forma, la adicción al casino y juegos de azar debe ser tratada cuanto antes.
Si consideras que tú o un familiar ha desarrollado una adicción a las apuestas, debes buscar ayuda antes de que la ludopatía empeore. En este test de adicción al juego puedes comprobar si existe riesgo de ser algún tipo de ludópata. ¿Necesitas más información? Contacta con Guadalsalus, centro privado de desintoxicación. Lláma al 954 353 954 y solicita tu primera consulta gratuita.