¿Qué efectos secundarios provoca tomar benzodiacepinas?
Las benzodiacepinas son un grupo de medicamentos comúnmente prescritos para tratar trastornos de ansiedad, insomnio, convulsiones y otros problemas de salud mental. Aunque son una medicación segura y efectiva, las benzodiacepinas comportan efectos secundarios tanto a corto como a largo plazo.
Efectos secundarios a corto plazo
Entre los efectos secundarios de las benzodiacepinas más comunes a corto plazo se encuentran la sedación y la somnolencia. Téngase en cuenta que estos medicamentos actúan sobre el sistema nervioso central, induciendo una sensación de calma y relajación, lo que puede repercutir en una disminución de la alerta y la capacidad de concentración.
Otros efectos secundarios incluyen mareos, debilidad, dolores de cabeza y ataxia (pérdida de coordinación muscular). En algunos casos, los pacientes pueden experimentar problemas de memoria y dificultades cognitivas, lo que puede afectar a su rendimiento diario.
Efectos secundarios a largo plazo
Pero el uso de benzodiacepinas prolongado en el tiempo puede llevar a efectos adversos más graves. La tolerancia y la dependencia son dos de los problemas más significativos asociados con el uso a largo plazo de estas sustancias. Con el tiempo, los pacientes pueden necesitar dosis más altas para lograr el mismo efecto, lo que aumenta el riesgo de dependencia física y psicológica. Es más, se corre el riesgo de desarrollar una adicción en toda regla con sus consiguientes síntomas de abstinencia a las benzodiacepinas severos cuando se interrumpe el medicamento, incluyendo ansiedad, insomnio, irritabilidad y, en casos extremos, convulsiones.
Además, el uso crónico de benzodiacepinas se ha asociado con efectos cognitivos negativos. Estudios han demostrado que el uso prolongado puede llevar a deterioro de la memoria, problemas de atención y dificultades para procesar información. También hay evidencia que sugiere un aumento en el riesgo de desarrollar demencia en personas mayores que usan benzodiacepinas durante un periodo extendido.
Algunos riesgos adicionales que puede acarrear el uso cronificado de benzodiacepinas incluyen un mayor riesgo de caídas y fracturas, especialmente en adultos mayores. Debido a sus propiedades sedantes, pueden afectar el equilibrio y la coordinación, lo que puede resultar en accidentes.
Riesgos de combinar benzodiacepinas y tóxicos
La toma de benzodiacepinas con otros depresores del sistema nervioso central, como el alcohol, algunos antipsicóticos o los opioides, puede potenciar los efectos sedantes y aumentar el riesgo de sobredosis, lo cual conlleva riesgos graves. Algunos de los principales riesgos asociados con esta combinación son la depresión respiratoria, la sedación excesiva con los consiguientes riesgos de siniestralidad laboral o accidentes domésticos y de tráfico, el coma, la sobredosis, problemas cognitivos o de memoria… Por último, la combinación puede afectar la eficacia y seguridad de otros medicamentos que la persona pueda estar tomando, llevando a complicaciones adicionales.
Por todo ello, es fundamental que pacientes y profesionales de la salud evalúen cuidadosamente los efectos secundarios de las benzodiacepinas antes de iniciar el tratamiento. Aunque estos medicamentos son útiles para manejar ciertos trastornos a corto plazo, pero su uso debe ser monitoreado de cerca para minimizar los riesgos y evitar la dependencia, especialmente con el uso prolongado. En muchos casos, se recomienda explorar alternativas terapéuticas, como la terapia cognitivo-conductual o el uso de medicamentos con otro perfil más favorable según el caso. La educación y la supervisión médica son clave para garantizar un uso seguro y eficaz de estos medicamentos.
Determinados índices de tolerancia a la medicación abundante de benzodiacepinas y algunos perfiles psicológicos del paciente generan serias dificultades y complicaciones a la hora de su retirada. Entonces, se requiere una pauta de retirada supervisada por un equipo no sólo médico y psiquiátrico, sino también psicoterapéutico: se ha podido desarrollar una adicción.
En Guadalsalus contamos con un equipo especializado en adicciones para vivir sin dependencia a los fármacos y con la garantía de la supervisión médica, psicológica y psiquiátrica en el centro. Llama al 954 353 954 y pide tu primera cita gratuita para informarte de nuestros centros de ingresos diferenciados para hombres y mujeres y nuestros tratamientos ambulatorios. Ven a Guadalsalus. Sabemos cómo ayudarte.